Cocina con D1, una historia fallida

¡Cocina con D1 y gánate uno de los tres premios de 5 millones de pesos en efectivo! Esa era la consigna que estaba en todos los medios de comunicación oficiales de la tienda y sus redes sociales. Y sí, era verdad, entre el 11 y el 22 de mayo de 2020, en plena cuarentena y con el famoso Pico y Cédula (turnos para ir de compras según el último dígito de tu documento) la popular tienda de mercados y abarrotes colombiana quiso dinamizar sus ventas, premiando a sus clientes por cocinar una receta y hacer un tutorial de la preparación, utilizano exclusivamente los productos que habitualmente estaban disponibles en este establecimiento.

Como buen aficionado a la cocina, en cuanto me enteré del concurso comencé a idear una receta para participar. El problema era que solo podía salir un día en la semana y me enteré tarde de que podía concursar con uno de mis videos para obtener el premio. La verdad, lo que más me importaba era medirme, ver en qué condición estaba y cuánta aceptación podía tener una receta planteada por mí. Con el reloj en contra, porque ese mismo 22 de mayo fue el día que pude ir a comprar los ingredientes, y decidido a estrenar la batidora manual que había comprado, inicié los preparativos para la receta. Pensé que un postre sería más fácil de hacer, así que decidí tomar unos libros de recetas y adaptar una serie de cupcakes, con detalles hechos por mí, para acompañarlos con helado y café de las marcas que venden en D1.

Finalmente las recetas fueron tres:

  1. Helado casero de limón (es básicamente una chantilly saborizada y llevada a refrigerar por 12 horas).
  2. Cupcakes decorados con chocolate y pistacho, arándanos y frutos secos y manzana caramelizada con mantequilla de maní.
  3. Magdalenas de naranja.
Mise en place de la receta de cupcakes.

Comencé a preparar todo, lo primero fue hacer la chantilly, para reservarla. Luego de eso, batí la mezacla para los cupcakes, y mientras se horneaban, preparé las coberturas para estos: manzanas caramelizadas con canela y mantequilla de maní, cobertura de chocolate, arándanos y frutos secos… y por último, el café. Todo debía estar listo porque la grabación tenía que ser editada y cargada en la plataforma habilitada para el concurso, antes de la medianoche.

Terminé de organizar las preparaciones, grabamos el video, tomamos las fotos, descargarmos todo en el computador y ya solo faltaba la edición. Casi nada, ¿verdad? El asunto es que, incluso con la ayuda de mi cuñado en la edición y de mi hermana en la grabación del vídeo, terminar todo a tiempo fue una tarea difícil. ¡Pero lo logramos! !Sí! Pudimos editar y exportar el vídeo antes de que se acabara el tiempo. Pudimos subirlo a Youtube, que era uno de los requisitos, y a las redes sociales. Peeeerooo… había un último paso, el indispensable. Teníamos que cargar el vídeo con mis datos y una descripción breve de este, en una plataforma que la tienda había habilitado para la carga de los videos y posterior votación del público. Fue aquí donde las cosas se complicaron. Pues, simplemente, la plataforma colapsó por el gran volumen de vídeos que las personas queríamos subir y no pude subir mi vídeo, no sé qué tanta aceptación pudo tener, cuántos votos podía ganar por sí mismo; porque es cierto, no quería ofrecer recompensas ni mendigar likes, quería que mi propusta fuera evaluada por su contenido y no más. Por supuesto que la estética no iba a ayudar mucho, grabé con un celular de gama media-baja, y eso se nota, es evidente. Además de que hubo que grabar todo en la noche y la iluminación no era la mejor; pero aún así, quería ver de qué era capaz, de qué estaba hecho.

Y bueno, para no alargarles más la historia, tuve que conformarme con que en mi casa me dijeran que los cpcakes estaban muy ricos. Sí, se los comieron todos, yo solo quise probarlos, estaba muy frustrado por no haber podido cumplir mi cometido. Pero al menos me quedó una historia para contar y, sin saberlo, ya tenía el primer tutorial en vídeo hecho por mí, explicando cómo preparar cupcakes con productos que encuentras en el supermercado. Así que la experiencia terminó siendo buena, y pues, sé que vendrán muchos más videos y mucho más contenido demostrando lo que me gusta, lo que me apasiona. Si quieres ver el resultado de tanto esfuerzo, puedes verlo a continuación. Atención, ahora sí te pediré el lie y que te suscribas y compartas si ves que este contenido te fue útil y fue de tu agrado.

Descubre cómo preparar delciosos cupcakes caseros, acompañados con helado y café. No son los típicos, son mis cupcakes.

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1 comentario en “Cocina con D1, una historia fallida”

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